sábado, 5 de mayo de 2012

El sicario de Stalin que tenía perros.

A proposito de la publicacion del Profesor F. Tuesta Soldevilla sobre este mismo libro, pero desde una diferente postura: http://blog.pucp.edu.pe/fernandotuesta/los-galgos-de-lev-davidovich  para una diferente conclusion.

los Editores

El sicario de Stalin que tenía perros.

Daniel Raventós · · · · ·


31/01/10


Métete esto en la cabeza de una puta vez: tú no piensas, solo obedeces; tú no actúas, solo ejecutas; tú no decides, solo cumples; tú vas a ser mi mano en el cuello de este hijo de puta, y mi voz va a ser la del camarada Stalin, y Stalin piensa por todos nosotros… (p. 341)
Él ve a Rakovsky, hermano querido, quien, principesco, había ofrecido al movimiento revolucionario su enorme fortuna. Ve a Smirnov, brillante y alegre; a Murálov, el general de enormes mostachos, héroe del Ejército Rojo… Ve a sus hijos Nina, Zina, Liova, a sus queridos Blumkin, Yoffe, Tujachevsky, Andreu Nin, Klement, Wolf. Todos muertos. Todos. L.D. está solo… (p. 361)
Las profecías de Trostky acabaron cumpliéndose y la fábula futurista e imaginativa de Orwell en 1984 terminó convirtiéndose en una novela descarnadamente realista. Y nosotros sin saber nada… ¿O es que no queríamos saber? (p. 488)
La editorial Tusquets publicó en septiembre de 2009 la novela del cubano Leonardo Padura El hombre que amaba a los perros. Se trata de un largo libro de 573 páginas de apretada letra. Padura era hasta ahora conocido principalmente por sus relatos cuyo protagonista es el policía cubano Mario Conde. Este libro es sin duda su obra más ambiciosa.
Los protagonistas principales de El hombre que amaba a los perros son el dirigente de la revolución rusa León Trotski y el sicario estalinista Ramón Mercader, nacido en Barcelona y militante del PSUC. Ramón Mercader, por orden de Stalin, asesinó a Trotski en la calle Viena del barrio de Coyoacán en Ciudad de México el 21 de agosto de 1940, pronto hará 70 años. Otros personajes importantes en el libro, además de la compañera del exilado, Natalia Sedova, son la madre del sicario, Caridad Mercader, y su amante, un altísimo cargo de los servicios secretos estalinistas, Nahum Eitingon, que elige a un Ramón Mercader muy joven para convertirlo en un asesino al servicio de Stalin. En la novela no sale en ningún momento el verdadero nombre de Eitingon y sí muchos de los falsos que utilizó: Kotov y Tom, entre otros.
Para escribir este libro Leonardo Padura ha afirmado que se documentó a fondo durante cinco años. Y el resultado es muy serio. En realidad, en El hombre que amaba a los perros hay tres novelas. Una está dedicada a los últimos años de la vida del revolucionario Lev Davidovich Bronstein (que ya de muy joven tomó el seudónimo de Trotski de un vigilante en jefe de una prisión zarista en la que estuvo preso en los inicios de su actividad política) desde su deportación a Alma Atá hasta su asesinato. Se trata de un período de 12 años, 1928-1940. La segunda y más larga, cuenta la vida de Ramón Mercader desde que tenía 22 años (nació en 1914) cuando es reclutado por Eitingon (“Kotov”) cuando ya Stalin había decidido acabar con la vida del creador del Ejército Rojo, hasta su muerte. Esta parte abarca de 1936 a 1978. Y la tercera, que tiene como principal protagonista a Iván, un escritor cubano fracasado, es una parte que se desarrolla en La Habana y que sirve para enlazar, con mayor o menor fortuna, las dos anteriores. Es la parte, con mucho, menos conseguida.
La historia es conocida. La guerra civil del acabado de nacer país de los soviets contra las fuerzas blancas monárquicas en coalición con los países más poderosos del momento –que incluye el Reino Unido, Japón, Alemania, Francia, EEUU? ha concluido. Decenas de miles de cuadros y militantes comunistas han quedado en el campo de batalla o muertos por las enfermedades que asolan el territorio soviético. Las tierras de la revolución sufren hambre. Lenin muere el 21 de enero de 1924 impedido físicamente ya desde algunos meses atrás de poder trabajar. Quiere llevar la batalla para apartar a Stalin de la secretaría general como deja expresado en uno de sus últimos documentos escritos, pero muere antes de poder hacerlo. Crece una burocracia privilegiada que elimina en pocos años el menor vestigio de democracia soviética y de cualquier otro tipo. Stalin, buen canalizador y muñidor de los intereses de esta floreciente nueva capa social, se erige como amo absoluto del PCUS y de toda la URSS. Dos datos sobre la burocracia cada vez más privilegiada que crece sin freno y que es la principal base social que explica el triunfo de Stalin. El primero: en 1923 el partido bolchevique tiene 370.000 afiliados de los cuales solamente 35.000 son obreros, las dos terceras partes de la afiliación son asalariados del partido, el ejército (aunque Trotski es el jefe formal del mismo y goza de gran prestigio entre los veteranos de la guerra civil, Stalin ya ha colocado a sus fieles en los puestos clave para minar su autoridad), los sindicatos, los organismos estatales… El segundo: ya a finales de 1926, un militante a sueldo del partido del nivel más bajo gana entre 5 y 6 veces más que el salario medio obrero. Pero en 1927 ni aún el propio Stalin se atreve a asesinar a Trotski pues solamente han pasado 10 años de la revolución rusa y el papel protagonista en la misma del excomisario de la guerra está todavía demasiado presente entre la población de la URSS, los cuadros del partido y el movimiento comunista internacional (Trotski había sido junto con Lenin el dirigente más conocido doméstica e internacionalmente durante los primeros años de la Tercera Internacional; en todo el mundo el partido bolchevique es conocido aún por el partido de Lenin y Trotski). Con los preparativos de la Segunda Guerra Mundial, estos reparos ya no existen y el todopoderoso secretario general decide hacer los preparativos para asesinarlo. Trotski puede ser un auténtico problema cuando se inicie la guerra… o cuando acabe (1). Ramón Mercader representa una de las líneas posibles para liquidar al exilado, puesto que los servicios secretos preparan diferentes planes de asesinato y completamente independientes entre sí. Para convertirlo en posible asesino de Trotski, Ramón Mercader es enviado a la URSS y entrenado para tal fin siempre bien vigilado por el hombre al que Stalin le dio la orden directamente, Nahum Eitingon, omnipresente en la novela de Padura. Posteriormente, el esbirro se traslada a París y en 1938 conoce –en realidad, también el encuentro está preparado por la NKVD, las siglas en ruso del comisariado de asuntos internos, la sucesora de la GPU– a la estadounidense Sylvia Ageloff, una partidaria de Trotski (2), con la que logrará intimar y tener una relación supuestamente amorosa. Así va introduciéndose en el círculo más reservado del exilado hasta que puede lograr una cita para permanecer a solas con él en la habitación en donde acostumbraba a trabajar el revolucionario. Como es conocido, Mercader, entonces camuflado con el falso nombre de Jacques Mornard y representando el papel de un apolítico hombre de negocios belga, le atizó un mortífero golpe en la cabeza con un piolet, esta pieza imprescindible para toda persona que practique la alta montaña. No le produjo instantáneamente la muerte, pero sí unas horas después.
Esta rápida enumeración de algunos de los hechos más importantes que novela Padura en El hombre que amaba a los perros está bien desarrollada, pero con una tersura un tanto desigual.
Me parecen especialmente sobresaliente los fragmentos del libro que desarrollan los episodios sobre la transformación en algún edificio de la NKVD en la URSS del joven Ramón Mercader en Jacques Mornard (el frío asesinato de un pobre vagabundo acusado de “perro trotskista” es memorable); la forma de describir lo que realmente preocupaba a la burocracia estalinista del alzamiento fascista contra la II República española: que no pudiera convertirse en una revolución (3); la conversión de los partidos comunistas en simples peones de la diplomacia de la URSS, siendo uno de los campeones de ello el PCE con su servilismo (Dolores Ibárruri queda retratada en algunas páginas dedicadas a la guerra civil y al posterior regreso del asesino de Trotski a la URSS) a los dictados de Stalin y sus recaderos; los momentos en que se cuenta el secuestro del dirigente catalán del POUM Andreu Nin y el criminal montaje para el exterminio de este partido; el modo de describir el cinismo de tantos dirigentes de la época de Stalin, ejemplarizados en la novela por el implacable Nahum Eitingon (4); la dedicación próvida de algunos secretarios de Trotski, entre ellos el que lo fue de 1932 a 1939, Jean Van Heijenoort, posteriormente un destacadísimo lógico matemático que enseñó en las universidades de Columbia y Stanford; el drama increíble que supuso para Trotski tener que sobrevivir a la muerte de sus 4 hijos: Nina y Zinaida, las hijas también de Aleksandra Sokolovskaya, y los dos varones que tuvo con Natalia Sedova (el mayor, Liova, asesinado en París por un agente de Stalin infiltrado en los círculos trotskistas y que se había ganado la confianza de la propia víctima, era la mano derecha política de su padre; el menor, Serguei, no interesado en la política, murió (5) en uno de los escalofriantes campos de trabajo forzado de la URSS); las caracterizaciones de dos pintores mexicanos: la del cobarde Siqueiros y la del inconsistente y poco fiable Diego Rivera; la descripción de los momentos en que todo el mundo se convirtió en un “planeta sin visado”, en que derechistas, socialdemócratas (fabulosas las páginas dedicadas al tornadizo Trygve Lie cuando Trotski está semipreso en Noruega en 1936, entonces jefe de los socialdemócratas noruegos y después secretario general de la ONU entre 1946 y 1952), fascistas, monárquicos y, por supuesto, estalinistas, se vengan del que ven como odioso causante del triunfo revolucionario en 1917, hasta que Lázaro Cárdenas lo acoge en México; el ambiente claustrofóbico en la fortaleza de Coyoacán, y los momentos del asesinato, con el drama político objetivo que supone el hecho de que Trotski (que no perdió la conciencia hasta horas después del golpe asestado por el sicario barcelonés de Stalin) exhorte a sus guardias que han venido a socorrerlo para que averigüen a quién sirve el asesino, si a la Gestapo o a la NKVD (6). En todo caso, Trotski ya sabía que su fin era cuestión de poco tiempo y lo dejó más de una vez escrito, convencimiento que también está muy correctamente desarrollado en El hombre que amaba a los perros.
Pero quizás uno de los momentos de la novela que resulta especialmente imponente por su gran significado político y por la forma en que está contado es al que voy a dedicarle algunas líneas a continuación.
Se trata de un episodio bien conocido por los historiadores y biógrafos de Trotski. El protagonista es Nikolai Bujarin, uno de los más brillantes dirigentes bolcheviques, elegido en 1926 secretario general de la Tercera Internacional y sombra tenue de lo que fue cuando se convierte en aliado, y después víctima, de Stalin. Estamos a comienzos de 1936 y en Noruega, Trotski recibe una carta de un viejo adversario Fiódor Dan, un menchevique exiliado en París con el que había tenido grandes enfrentamientos durante los días que van de la revolución de Febrero a la de Octubre de 1917. Dan le expresa su extrañeza de que Bujarin haya sido enviado a Europa para comprar documentos con destino al Instituto Marx-Engels-Lenin. El menchevique enunciaba su asombro por el hecho de que Stalin hubiera elegido a Bujarin para este menester. Estupefacción que se acrecentó cuando también fue enviada pocos días después a París Anna Larina, la esposa de Bujarin. ¿Estaba Stalin invitando a Bujarin a desertar? Pocos días después, Bujarin recibe la orden escrita de Stalin de regresar a Moscú. Sabe que regresar equivale a morir en más o menos poco tiempo (efectivamente, Bujarin fue condenado y ejecutado tan solo dos años después, en marzo de 1938, en uno de los depravados procesos de Moscú). Conocidos y exilados le sugieren que si se queda en Europa podría convertirse en un segundo Trotski y liderar juntos una oposición con mayores oportunidades de desbancar a Stalin. Pero Bujarin prepara el regreso a Moscú, sigue contando Dan en la carta. Entonces le preguntan que cómo es posible que después de haber luchado contra el temible zarismo, se encaminase ahora como un cordero mansamente al degüello. La respuesta de Bujarin es terrible: “vuelvo por miedo”. Bujarin se sinceró: él no estaba hecho de la misma madera que Trotski y “eso Stalin lo sabía y, sobre todo, lo sabía él mismo”. Idea que, con otras palabras, expresa en su propio proceso cuando declara: “Hay que ser Trotski para no deponer las armas”. “Vuelvo por miedo” Bujarin lo razona, en la carta de Dan, con estas escalofriantes palabras: “Sé que tarde o temprano Stalin va a acabar conmigo; quizás me mate, quizás no. Pero voy a regresar para aferrarme a la posibilidad de que no crea necesario matarme. Prefiero vivir con esa esperanza que con el miedo constante de saber que estoy condenado.” Para Trotski esta revelación fue la certeza de que Stalin ya no quería dejar ningún superviviente entre los dirigentes de la revolución, por útiles que le hubieran sido en algún momento, como fue el caso de Bujarin entre tantos otros. Efectivamente, el ¡90 por ciento! del mítico Comité Central bolchevique que protagonizó la revolución de 1917 fue exterminado físicamente por Stalin.
El conde Czernin, representante austríaco en las negociaciones de Brest-Litovsk en 1918, harto de la inteligencia e inflexibilidad de Trotski como comisario del pueblo de asuntos exteriores y jefe de la delegación soviética, expresó más de una vez su deseo ardiente de que apareciera una Charlotte Corday que eliminara al jefe revolucionario. Stalin hizo realidad con Ramón Mercader el sueño del reaccionario conde aunque éste ya no estuviera vivo para poderlo disfrutar.
El libro del novelista cubano aún no se ha publicado en Cuba. Está previsto que circule en aquel país en breve. Padura no está muy seguro de cuáles puedan ser las reacciones. Ramón Mercader, el hombre que según Leonardo Padura “amaba a los perros” especialmente a la raza de los borzoi, murió el 18 de octubre de 1978 en La Habana, después de haber pasado 20 años en las cárceles mexicanas y de haber recibido, en 1961 al regresar a Moscú, la medalla de mayor distinción en la URSS desde 1934 a 1991: la estrella de Héroe de la Unión Soviética.

Notas:
  1. (1) Un año antes del asesinato de Trotski, el 25 de agosto de 1939, el embajador francés en Berlín, Robert Coulondre, intenta disuadir a Hitler de que no invada Polonia. La guerra, como lo fue la de 1914, puede ser el preámbulo de la revolución y ello encoge algunos espíritus. La forma de expresarlo del embajador francés ante Hitler es: “Temo que al término de una guerra no haya más que un vencedor: el señor Trotski.”
  2. (2) Increíblemente representada por Romy Schneider en la nada afortunada película de Joseph Losey El asesinato de Trotski (1972), en donde el papel de Trotski lo desempeña Richard Burton. Romy Schneider era una actriz sumamente guapa, Sylvia Ageloff era una mujer muy poco agraciada. Ramón Mercader, quizás adecuadamente representado por Alain Delon en la película mencionada, era un hombre físicamente atractivo. Mercader siempre que tuvo que carearse, después del asesinato, con Ageloff debió soportar que ésta invariablemente le escupiese en la cara para mostrarle el desprecio que le producía por la sucia y bellaca manipulación de la que había sido objeto.
  3. (3) El 20 de marzo de 1937 Stalin escribe a Rafael Alberti y María Teresa León: “Hay que decir al pueblo y al mundo entero que el pueblo español no está en condiciones de realizar la revolución proletaria” (citado por Jean-Jacques Marie en Trotski, FCE, 2009).
  4. (4) Que, como tantos otros estalinistas, también sufrió tortura y cárcel en la URSS, pero la muerte de Stalin en 1953 motivó su excarcelación. Vivió hasta 1981. Una genial y estremecedora descripción del terror estalinista que no solamente afectaba a auténticos trotskistas sino a estalinistas de más o menos luces, escrita por alguien que lo sufrió también directamente, es El caso Tuláyev de Víctor Serge (Alfaguara, 2007).
  5. (5) Padura menciona en varias ocasiones el recuerdo que tuvo Trotski, a medida que iban muriendo sus hijos, sus familiares más cercanos, sus colaboradores y miles de partidarios reales o imaginados por Stalin, de las palabras que el veterano bolchevique Georgy Piatakov lanzó, después de una sesión del Politburó del 18 de octubre de 1926: “¿Por qué Lev Davidovich ha dicho eso? Stalin no se lo perdonará ni a sus bisnietos”. Piatakov se refería a las premonitorias palabras de Trotski en dicha sesión del Politburó en donde había acusado a Stalin de “sepulturero de la revolución”.
  6. (6) El judío Trotski fue calumniado ininterrumpidamente por todo el poderoso aparato estalinista de ser agente al servicio de Hitler… hasta que se selló el pacto Molotov-Ribbentrop el 23 de agosto de 1939. Entonces las calumnias tuvieron que reencauzarse.











Vidas en susurros II


El poeta ruso Konstantin Simonov. 1947/ Condé Nast Archive/ Corbis

Ahora bien, hablar de vida privada es paradójico en un régimen que intentó aniquilar cualquier espacio de privacidad. El régimen estalinista dinamitó la intimidad e, incluso, castigó las relaciones familiares y sociales. La detención de uno de sus miembros mancillaba a toda la familia, evitando así que el espacio privado se convirtiese en un reducto para la libertad. Hubo personas como Vladimir Korsakov, nacido dentro de una familia afectada por las purgas de las décadas de los 30 y 40, que rechazó hacer carrera como bailarín para “fundirse con la masa proletaria” y no ser señalado como hijo de un enemigo de pueblo. Es lo que Figes denomina, a través de la memoria de otra víctima, como el “miedo genético”. Los hijos de las víctimas vivieron con cautela y en numerosas ocasiones intentando entender qué habían hecho mal. Se ocultaron de tal manera, que en muchas ocasiones no se confesaba la mácula familiar ni al propio cónyuge. Como le sucedió a Antonina Golosina, que descubrió tiempo después que estuvo casada con una víctima de la represión como ella misma. Incluso hubo personas que buscaron limpiar su historial casándose con miembros del Partido, en el que lucharon denodadamente por ser aceptadas creyendo que su tragedia se debía a unos fines superiores que encabezaba Stalin. En otros casos la abjuración procedía de los propios padres, para no empeorar la situación. Un mundo con cientos de testimonios imborrables y la dureza en unas líneas: “Zoia, es cierto. Soy culpable, únete al Komsomol. Ésta es la última vez que te escribo. Sed felices, tú y Lialia. Mamá”.

       Mientras algunos se atrevían a susurrar, muchísimos más callaban y guardaban silencio. Y otros, no debemos olvidarlo, actuaron en favor del mal, cuya naturaleza tanto preocupó a la indispensable Hannah Arendt, como el intelectual Konstantin Simonov. Porque detrás de cada historia y cada acusación se encontraban otros susurros bastantes más siniestros, los de los delatores. Figes elige al “escritor proletario” Simonov como la representación de la persona que durante el estalinismo se comprometió con el mal.
       Es el auténtico héroe trágico del libro. De origen aristocrático llegó a ocupar cargos en la jerarquía estalinista, hasta ser considerado “el favorito de Stalin” y, como tal, participó de la persecución de sus compañeros considerados liberales y en las campañas antisemitas del régimen y hasta llegó a delatar a familiares. Mucho tiempo después, al final de su vida, reflexionó arrepentido en unas duras memorias sobre sus actuaciones, aceptando sus errores y su culpabilidad dentro del terrorífico engranaje del estalinismo.

       La presencia anónima del delator, que bien podía ser un vecino o un compañero de trabajo, hizo que popularmente se asegurara que las paredes también oían. Sabían que después de la delación se encontraba un proceso terrible de destrucción personal, de los lazos familiares y comunitario -incluso de los sentimientos-, las purgas, los asesinatos o el siniestro sistema de Gulag. Pero la pesadilla del miedo, el temor y la sospecha no se quedaba sólo entre los supuestos enemigos del régimen, sino en el propio interior del Partido. Muchos de los fieles al ideal revolucionario lo notaron en su propia carne. El terror no tenía lógica. Muchos sobrevivieron a los tormentos de convertirse en víctimas sin saber bien cómo habían llegado a esa adversa situación, y nos lo narraron como Evgenia Ginzburg. La gran victoria de Stalin fue que este miedo le sobreviviera a la muerte transmitido de generación en generación. Aún pervive en el presente. Así lo señala el propio historiador británico señala sorprendido al constatar cómo actualmente es más complicado acceder a la memoria de esta represión que en la década de los noventa del pasado siglo.

Los que susurran. La represión en la Rusia de Stalin

letras


Vidas en susurros

Joseba Louzao




Me aferro a la esperanza de que el proletariado, el Komsomol de Lenin y el Partido de Lenin y de Stalin ocuparán el lugar de mi padre, cuidando de mí como su verdadera hija y ayudándome a encontrar mi camino en la vida”. Anna Krivko escribía estas palabras en una desesperada carta a uno de los dirigentes de su sóviet. Su padre y su tío habían sido detenidos y, como consecuencia, la joven de 18 años había sido expulsada de la universidad y de la organización juvenil comunista. No podía mantener a su familia, su madre, su abuela y su hermana recién nacida, porque como elemento ajeno al Partido y al pueblo no podía encontrar ningún trabajo. En la misiva renegaba de su padre del que se sentía avergonzada porque formaba parte de la canalla antisoviética que le habían enseñado a odiar “sin compasión ni excepciones”. Esta historia es una de las tantas que vivieron millones de personas bajo el estalinismo. Una cuestión surge instantáneamente al encontrarse ante estas amargas narraciones: ¿cómo fue la vida cotidiana en la Unión Soviética bajo el terror constante que acechaba en cualquier esquina? ¿Cómo se logró sobrellevar el día a día en un régimen totalitario de las dimensiones desarrolladas en la época de Stalin?

A responder a esta oscura y problemática pregunta dedica su último libro el acreditado historiador Orlando Figes (Londres, 1959). Figes, que es actualmente profesor de historia en el Birkbeck College de la Universidad de Londres, colabora como crítico en publicaciones como The New York Times, Book Review o Times Literary Supplement. Su éxito editorial se debe en gran medida a la conjunción de una cuidada prosa y el mayor rigor académico. Su carrera bibliográfica e investigadora, centrada en explicar la Revolución Rusa y sus trágicas consecuencias, está nutrida de alabanzas constantes a su labor, lo que le ha valido el reconocimiento indiscutible como uno de los más importantes historiadores de la Rusia contemporánea. Cada capítulo de sus obras aúna un conocimiento enciclopédico, una honda mirada histórica y una presentación de los temas sugerente, lo que hace que los lectores se sumerjan en debates complejos sin entorpecer por ello la lectura con disquisiciones excesivamente técnicas. Aunque tampoco caeremos en el tópico de decir que sus libros se leen como novelas, porque eso nunca será cierto y los lugares comunes están para no transitarlos.

Con The Whisperers: private life in Stalin´s Russia (Los que susurran. La represión en la Rusia de Stalin, Edhasa, Barcelona, 2009), el historiador británico acaba de marcar otro hito en su fructífera trayectoria historiográfica. Ya había demostrado su interés por la vida en la Unión Soviética con Peasant Russia, Civil War: The Volga Countryside in Revolution, 1917-21 (1989 – no traducido al español), donde trataba de explicar, gracias a la consulta de archivos locales hasta entonces vedados a los investigadores occidentales, cómo el triunfo de la revolución se basó en una serie de transformaciones interrelacionadas que se produjeron en el mundo rural ruso durante los primeros años del dominio bolchevique. Pero no sería hasta la publicación de la multipremiada People's Tragedy: Russian Revolution 1891-1924 (1996 – edición española: La Revolución Rusa, 1891-1924: la tragedia de un pueblo, Edhasa, Barcelona, 2000), juzgada como una de las mejores obras escritas nunca sobre la Revolución, cuando Figes diese el salto definitivo al reconocimiento más allá de la comunidad académica. Tras el éxito llegó un libro magnífico, aunque siempre se suele olvidar en las reseñas por ser el más académico, Interpreting the Russian Revolution: The Language and Symbols of 1917 (1999 – edición española: Interpretar la revolución rusa: el lenguaje y los símbolos de 1917, Biblioteca Nueva, Madrid, 2001), escrito junto a Boris Kolonitskii, en el que se intentaban analizar los cambios que se desencadenaron en palabras y símbolos durante la lucha política que se desarrolló entorno al 17 ruso. Y finalmente publicaba Natasha's Dance: A Cultural History of Russia (2002 – edición española: El baile de Natacha: una historia cultural rusa, Edhasa, Barcelona, 2006), un rico texto donde abandona el período revolucionario para ensayar una interpretación arriesgada de la historia cultural rusa a lo largo de los últimos siglos.

http://www.fronterad.com/?q=node/491&page=0,0



LA VIOLENTA REALIDAD DE REPSOL

Contaminación y violación de DDHH

        La violenta realidad de Repsol

lunes 16 de abril de 2012

El Gobierno y los medios del Estado español se lanzan a defender a Repsol, una compañía que no es española, y se olvidan del dramático historial de la empresa en materia ambiental o de respeto de los Derechos Humanos. Estas son algunas de las sombras que oculta la multinacional.

Por Equipo Otramérica
Este artículo no pretende valorar la nacionalización de YPF por parte del Gobierno de Argentina. Sin embargo, parece razonable explicar qué es Repsol y qué esconde para así tener todos los elementos.

¿Española?

Tal y como explica el diputado de Izquierda Unida Alberto Garzón Espinosa, la propiedad ‘española’ de Repsol es más que cuestionable. Desde que fuera privatizada por el gobierno socialista de Felipe González (1987), la empresa ha ido pasando a manos extranjeras y ahora más del 50% pertenece a accionistas no españoles. En concreto:  “el 42% pertenece a fondos de inversión extranjeros –gestionados habitualmente por grandes bancos- y el 9’5% pertenece a la empresa mexicana PEMEX). El resto de la empresa es propiedad del grupo de capital privado español Sacyr (10%), de una entidad financiera española como Caixabank (12’83%) y de más capital privado español”.
Por tanto, las soflamas nacionalistas del Partido Popular (PP) o del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) parecen un poco exageradas.

Hay buenos análisis sobre cómo Repsol escapa del fisco español gracias a las diferentes ayudas y estrategias legales. El que no perdona es Antonio Brufau, su presidente, que en 2010, según os técnicos de Hacienda en España, logró una retribución personal récord con unos casi 9.5 millones de dólares en su cuenta.

¿Una empresa responsable?

Según la propia Repsol, desde 2006 a 2010 ha registrado unos 7.000 derrames de hidrocarburos –algo “inherente a la industria petrolera”. Pero esos derrames “inherentes” han vertido un total de 7.499 toneladas de hidrocarburos lo que supone que cada día que pasa, Repsol vierte en alguna parte del mundo 5.13 toneladas de residuos contaminantes.

Hay casos repartidos por todo el mundo (incluidas Tarragona y Puertollano, en España), pero estos son algunos de los casos más recientes y llamativos en América Latina, aunque no ocuparon portadas en los medios españoles que hoy reaccionan airados ante la nacionalización de YPF en Argentina:

- 16 de enero de 2012
Loma de la Lata (Neuquén, Argentina). Comunidad mapuche Kaxipayin. Derrames en la planta USP-11.
-27 de marzo de 2011
Derrame en el Bloque 16 clindante con el Parque Nacional Yasuní (Ecuador)
- 27 de febrero de 2009
Derrame en el Oleoducto de Crudos Pesados en la reserva de Cayunté Coca (Ecuador)
- 1 de enero de 2008
Ecologistas en Acción denuncia un derrame de petróleo y aguas de formación de grandes magnitudes en el parque Yasuní (Ecuador) que provoca graves daños ambientales y alteraciones a la forma de vida de los habitantes.

¿Mejoras para las poblaciones?

Las denuncias sobre la actitud de Repsol YPF en América Latina respecto a los derechos humanos se multiplican. Si el Observatorio de Multinacionales en América Latina las he hecho públicas en diferentes ocasiones, son ya muchos los casos de violación de derechos acumulados en los últimos años. Estos son algunos.

- Diciembre 2011 / Escándalo con la AECID

La Red por la Abolición de la Deuda Externa denuncia que la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID) ha concedido fondos públicos de cooperación española a la Fundación Repsol YPF para el “fortalecimiento de los emprendimientos económicos y sociales de las comunidades en zona de influencia de la operación de Repsol YPF Ecuador en la Amazonía ecuatoriana”, lo que podría traducirse en ayudas a las comunidades que habitan la zona en que Repsol extrae petróleo, lugares sobre los que la actividad de Repsol tiene de acuerdo a las denuncias un grave impacto en los derechos humanos y el medioambiente.
La Fundación Repsol es una careta que la empresa, como habitualmente todas las grandes multinacionales, utiliza para maquillarse de verde, para darse una imagen amigable para con el medio ambiente y las comunidades afectadas. En Ecuador, los “accidentes” de Repsol son frecuentes. La contaminación y el destrozo, inevitables. La pobreza, persistente.
Con éste comportamiento la AECID contribuiría a la intensión de esta fundación de limpiar la imagen de la petrolera, que en Ecuador acumula denuncias de violación de los derechos humanos de las poblaciones indígenas y daños irreparables al medioambiente. Repsol YPF no es un agente legitimado para exportar ningún concepto ni ayuda para el desarrollo. 
En abril de 2012, el Gobierno español respondió a una pregunta parlamentaria obviando todas las denuncias existentes y ratificando la "subvención" de la AECID a la Fundación Repsol.

- Octubre 2010 / Perú

Survival Internacional colocó a Repsol YPF en el top 5 de la vergüenza en 2010 por “Repsol / Perenco: el gigante petrolífero hispano-argentino Repsol YPF y la empresa de hidrocarburos franco-inglesa Perenco están explotando el territorio de los indígenas aislados en el norte de Perú. Ambas operan en una zona donde viven indígenas no contactados. Perenco sugiere a sus trabajadores, si son atacados: “asustadlos y ahuyentadlos, y decidles que se vayan a casa”, entre otras cosas”. 

- 26 de Julio de 2007 / Perú

Intermón Oxfam presenta en Madrid un informe que denuncia la “violación sistemática” por parte de Repsol YPF de los derechos de las poblaciones indígenas en cuyos territorios opera en Perú, una región cuya legislación presenta “vacíos” entorno a la protección de estas poblaciones de los que la petrolera española “se aprovecha” para operar.
En declaraciones a Europa Press, la responsable del programa de sector privado de Intermon Oxfan y firmante de este informe titulado ‘Pueblos sin Derechos’, Isabel Tamarit, explicó que tras “tres años trabajando con la compañía” en la mejora de su política de responsabilidad social en Perú sin que se haya producido “ningún avance”, la ONG española ha decidido hacer pública la “falta de compromiso” de Repsol YPF para promover un cambio definitivo.
El informe, que recoge testimonios de afectados directamente por las exploraciones y explotaciones petroleras en las que la compañía está presente, recoge, en líneas generales, “cuatro grandes violaciones de derechos” de la población indígena: el derecho a consulta, el derecho a indemnizaciones y compensaciones por daño, el derecho a participar en los beneficios y a decidir el desarrollo de su comunidad y, por último, los derechos laborales de algunos trabajadores. 

-2006 / Bolivia

Benildo Vaca es delegado de la Asamblea del Pueblo Guaraní de Bolivia. Su comunidad también está situada en una zona de máxima explotación del país, en este caso gasística: el Campo Margarita. Allí los impactos de la actividad de Repsol YPF son similares a los descritos para el caso de Neuquén. La Asamblea del Pueblo Guaraní está exigiendo a Repsol YPF el respeto a la población indígena, puesto que la empresa no consulta a las poblaciones autóctonas antes de entrar en su territorio, violando así el Convenio 169 de la OIT. Los operarios de Repsol YPF profanan lugares indígenas sagrados en su actividad. Vaca ha explicado cómo está luchando por que la empresa les compense económicamente por los daños causados.

(Campaña Repsol Mata).

Perú: Declaración de Iquitos

Comité de Defensa del Agua
Al pueblo de Iquitos, Loreto, la Amazonía y del Perú
 
El Comité de Defensa del Agua de Iquitos, constituido en marzo 2012, en virtud del respeto a la Constitución Política del Estado que señala en su  Art. 1°  “La defensa del ser humano y el respeto a su dignidad es el fin supremo de la sociedad y el Estado”; y como derechos fundamentales de todas(os) la vida, salud, la integridad moral, psíquica y física, a un ambienta sano y equilibrado, a su libre desarrollo y bienestar, y los derechos colectivos consagrados en el Convenio 169 de la OIT y la Declaración Universal de los Derechos Humanos. 
 
DECLARA: 
 
En Loreto, somos testigos de los impactos que ha dejado más de 40 años de actividad petrolera en los lotes 1-AB y 8 calificado por los expertos como la mayor tragedia ambiental de la Amazonía peruana, donde antes la OXY y hoy PLUSPETROL NORTE, han causado graves impactos en el territorio, el medio ambiente, la vida, la salud y los procesos sociales de los pueblos indígenas y bosquesinos de la cuenca del Pastaza, Tigre, Corrientes, Marañón y la Reserva Nacional Pacaya Samiria.  
 
Por su importancia para la vida y la conservación en la Amazonía, el GOREL, en el 2003 mediante Ordenanza Regional declaró la Cuenca del río Nanay como zona de exclusión para actividades de extracción minera y para aquellas que alteren la cobertura vegetal; en el 2008 declaró de interés público regional la protección de las cabeceras de cuenca de los ríos Nanay, Mazan y Arabela y promovió el establecimiento del área de conservación regional del Alto Nanay, Pintuyacu y Chambiraque tiene como unos de sus objetivos conservar el recurso hídrico, originado en las nacientes de los ríos Nanay, Pintuyacu y Chambira de forma que asegure la calidad y aprovisionamiento de agua y otros servicios ambientales en beneficio de la población local y de la ciudad Iquitos, mediante el manejo integral de la Cuenca.
 
Cabe citar como precedente importante, que en Cajamarca, el proyecto “Conga” de la minera Yanacocha y la resistencia de las comunidades y rondas campesinas y del pueblo de Cajamarca, junto a su Gobierno Regional, han puesto en el escenario social y político del Perú  la lucha por la defensa del agua y el derecho a la vida como parte de la agenda nacional; siendo que este tipo de proyectos cuenta con el respaldo del gobierno central a pesar de que pretende destruir cinco lagunas en cabeceras de cuenca de un fértil valle y es promovido por una empresa que ya ha demostrado en el Perú su irresponsabilidad en el cumplimiento de normas ambientales.
 
En Loreto, la situación es más preocupante, el Gobierno Regional de Loreto ha mostrado una total incoherencia sobre el tema ambiental, por una parte promovió que el río  Amazonas haya sido considerado una “maravilla mundial”, y paradójicamente no ha hecho nada para enfrentar la situación ambiental en las zonas impactadas y contaminadas por explotación petrolera. Esta situación es histórica, porque desde los años 90’ se identificó una de las amenazas principales al abastecimiento de agua de la ciudad de Iquitos, advirtiéndose las operaciones de las dragas para la exploración y explotación de oro en la Cuenca del Nanay.   
 
Actualmente esta situación se agrava, con la concesión hidrocarburífera a la Conoco Phillips en la cabecera de cuenca del río Nanay, para la explotación petrolera, pese  a que por Ordenanza Regional N° 020-2009-GRL-CR, del 15 de octubre del 2009, en cuyo Artículo primero: Declara de interés público regional la conservación y protección de las cabeceras de cuencas ubicadas en los ríos de la Región Loreto, con el objetivo de proteger los importantes procesos ecológicos, garantizar la protección del recurso hídrico y la provisión de recursos naturales esenciales para los pobladores de las comunidades de estas cuencas y la conservación de la diversidad biológica, a través de la preservación de los corredores ecológicos.
 
Sin embargo, el actual Gobierno Regional de Loreto no ha defendido la exclusión y el carácter de interés público de su protección; por el contrario, promueve la presencia de la empresa  petrolera Conoco Phillips, que viene operando desde hace un año y medio en el lote 129 superpuesto a las cabeceras de la Cuenca del Río Nanay, Pintuyacu, Chambira y Mazán, proyecto de exploración sísmica 2d de 778 km que ha desbrozado 180.74 hectáreas de cobertura vegetal y que en 22 líneas sísmicas ha efectuado 15560 detonaciones de dinamita (una cada 50 metros de la otra) para obtener sus datos de prospección sísmica. Y ahora se pretende lograr la aprobación para perforar 18 pozos exploratorios que funcionarían desde 6 plataformas en el lote 129.
 
Para nosotros, este río es la principal fuente de abastecimiento de agua para la ciudad y proveedora de otros recursos como el pescado, la carne de monte, las crisnejas y maderas para la construcción de viviendas. Asimismo es una zona que posee características excepcionales de biodiversidad y endemismo, por ser parte de la ecorregión de bosques húmedos del Napo.
 
Ante este hecho y conscientes de que las actividades de exploración petrolera ya están causando impactos en una zona ecológicamente importante y frágil, las organizaciones y ciudadanos y ciudadanas que suscribimos esta DECLARACIÓN en defensa de la vida y el derecho de todos a un ambiente sano y equilibrado.
 
DEMANDAMOS LO SIGUIENTE:
 
·         Que el GOREL, realice una audiencia pública a fin de explicar su posición frente a las actividades ya iniciadas en el lote 129 y que afectan la cuenca del Nanay.
 
·         En el marco del cumplimiento de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública N° 27806, que se hagan públicos todos los documentos, (Estudio de impacto ambiental, informe del PROCREL, informe del SERNANP,)incluidos los Informes 476-2011-PROCREL-GRL-GGR, del 5 de octubre de 2011, y el informe 1186-2011-SERNANP-DG-ANP del 20 de octubre de 2011, y los términos de referencia que solicita la exploración de 18 pozos en 6 plataformas, que obran en poder del GOREL y que a la fecha permiten estas actividades.
 
·         El respeto y cumplimiento de la ordenanza N° 020-2009-GRL-CR, en todos sus términos.
 
CONVOCAMOS:
 
·         Al pueblo de Loreto, a realizar un foro regional con la finalidad de tratar este grave problema.
 
·         A las comunidades nativas de la zona a exigir el derecho a ser consultados.
 
·         A los caseríos, trabajadores de mercados, Colegios profesionales, Universidades a realizar foros sectoriales y talleres informativos sobre los riesgos que significa la actividad petrolera en la cuenca del Nanay.
 
·         A movilizarnos pacíficamente en defensa del agua y la vida como un derecho de todos y todas.
 
·         A los medios de comunicación, a difundir las acciones a favor de la defensa del agua y de la vida.
 
Iquitos, 24 de abril del 2012
 
 
ORGANIZACIONES SOCIALES E INSTITUCIONES                                  REPRESENTANTE
 
1.         Asociación La restinga                                                      Luis González Polar
 
2.         Asociación Cultural Estamos en la Calle                        Natalia Power Morán 
 
3.         Colegio de Contadores Públicos de Loreto                   Carlomagno Grández
 
4.         Observatorio Petrolero de Amazonía Norte                   Wendy Pineda 
 
5.         Alianza Arkana                                                                  Darrin D. Mortenson
 
6.         Colectivo de Mujeres Amazónicas Catleya                  Ana L.  Ríos González
 
7.        Asociación Mayantu                                                        Ricardo Rojas Chisquipama
 
8.         Colectivo Amazonía                                                         José Manuyama Ahuite
 
9.         Programa de Defensa de Derechos Indígenas/-PDDI         Jorge Tacuri Aragón 
 
10.     Partido Tierra y Libertad                                                    Rose Mary Lozano Santa
 
11.     Partido Socialista                                                                 Alenger Alva Arévalo
 
12.     Movimiento Propuesta Amazónica                                  Juan Ruk Guevara
 
Pueden hacernos llegar sus adhesiones a :
 
 

Mi Enemigo el Político


Mi Enemigo el Político
Jesús Ángel Martín Martín
Publicado el: 09/04/2012

Valladolid, abril de 2012

Creo que los nacidos en el siglo XXI van a estar oyendo hablar de la crisis mientras duren sus vidas; el caso es que oír hablar de política y de economía política es cada día más habitual y cada vez conozco a más gente a la que asquea el tema. Mi intención es recoger una serie de razones que avalan la idea principal de este artículo: que los políticos no están al servicio del pueblo, sino que se han convertido en una clase institucionalizada y profesionalizada con intereses propios y que estos intereses entran en conflicto con los del resto de ciudadanos; en definitiva, que gobiernan en primer lugar pensando en su propia casta, mientras que los intereses del país pasan a un segundo plano. La clase política es una clase improductiva y utiliza los recursos del país para su propio beneficio. Prueba evidente de ello es que los partidos mayoritarios solo se ponen de acuerdo para subirse sus propios sueldos, pero nunca llegan a ningún acuerdo por el interés nacional. Este hecho, en el que la mayoría de los ciudadanos coincidiría, al menos si se piensa un poco, tiene consecuencias importantísimas para la vida de la gente y para el futuro de un pueblo.
Si observamos lo que ocurre a nuestro alrededor, al menos en España, al punto nos damos cuenta de varias cosas:
·         La supremacía de la casta
Una de los oficios más prósperos en la actualidad es el de político; tiene su propio currículo y en él no cuentan mucho las destrezas administrativas o las habilidades intelectuales, como podrían parecer a primera vista, sino que se valora más la sumisión a la jerarquía, la demagogia y la fidelidad a la causa, o al partido.
En la crisis actual se están llevando a cabo recortes y medidas de ahorro que afectan a los ciudadanos, en algunos casos de manera drástica. Y sin embargo los sueldos de los que viven de la política no se ven afectados, más aun, continuamente proliferan cargos como los cientos de asesores, los directores generales, los menos generales, los secretarios, vicesecretarios, etc. Al hacerse más compleja la institución también se hace más caro su mantenimiento, con lo que las partidas presupuestarias destinadas a ese capítulo crecen a un ritmo bastante mayor que los recursos.
Ya se oyen voces en contra de las autonomías y como propuesta de solución de la crisis porque sería una forma importante de ahorro; sin embargo los que las gestionan lucharán con uñas y dientes por su pervivencia y por el mantenimientos de las instituciones autonómicas puesto que en ello les va su futuro. Además, las autonomías se han ido complejizando y su desmantelamiento resulta cada vez más difícil. Mantenerlas implicará, tarde o temprano, el desmantelamiento del estado el bienestar. Sin embargo estoy seguro de que se les exigirá a los ciudadanos este sacrificio antes de que los políticos acepten el suyo propio.
Esta idea, que resalta la perversión fundamental de la política al perder de vista el fin para el que nació, puede aplicarse con la misma exactitud al sindicalismo; hoy sería como el hermano pobre de la política, que vive de los mismos recursos y que trabaja para el mantenimiento de sus privilegios, instituciones y liberados en primer lugar, y sólo se acuerda de los trabajadores de vez en cuando para justificar su existencia.
Las leyes que hacen los políticos que legislan siempre benefician en primer lugar a la clase política o a las instituciones en las que se apoyan; cuando se tienen en cuenta los intereses de los ciudadanos se trata de medidas que indirectamente también beneficiarán a la clase encargada de administrar la ley. Por ejemplo, las multas de tráfico, que en principio están diseñadas para evitar accidentes, muertos y todo eso, pero cuando nos ‘cazan’ por exceso de velocidad siempre es en un sitio donde jamás ha habido un accidente; hasta sabemos por boca de algún ministro de Interior que se estimula la productividad de los agentes en función del número de sanciones que ponen. El fin último de las multas de tráfico debería ser el de evitar accidentes, pero vemos que en realidad es recaudar. Por esa razón cuando conducimos vamos pendientes, en primer lugar, de evitar las mulatas; vemos a los guardias de tráfico e instintivamente frenamos porque sabemos que no están para ayudar, sino para sancionar. Es un ejemplo tonto y superficial, pero bastante ilustrativo.
·         El enfrentamiento entre los ciudadanos como recurso
Cada día se oyen más voces en contra de los políticos y su valoración popular es cada vez peor. Pero la clase política lucha por sus privilegios; nadie gana tanto trabajando tan poco. Una de las formas de supervivencia que está desarrollando la clase política es el enfrentamiento entre clases sociales para que la sociedad no se enfrente a ellos. Un caso paradigmático es el tratamiento de los funcionarios. Hace unos meses el gobierno puso en el punto de mira a los funcionarios, señalándolos como los responsables de la crisis y amenazándolos con bajadas sueldo. El resto de los ciudadanos se frotaron las manos, y la envidia y el resentimiento hicieron su trabajo. Se les bajo el sueldo y la crisis siguió agudizándose, pero la estrategia dio sus frutos.
Hay otra forma de enfrentamiento entre ciudadanos más antigua, que ha sido impulsada desde la política, sobre todo desde el nacimiento de los políticos autonómicos; es la que enfrenta a los ciudadanos de unas regiones con otras. Me explico, yo soy del Madrid; siempre me ha gustado ver ganar al Madrid y, claro está, verle ganar al Barcelona también; pero antes, cuando el Barcelona jugaba en competiciones europeas me gustaba verlo ganar; sin embargo ahora me gusta verlo perder incluso cuando juega fuera de España; imagino que la perspectiva contraria es la que domina en Cataluña. ¿Qué es lo que ha cambiado en los últimos años para se produzca este cambio emocional? Pues creo que lo que está detrás es el sentimiento anti españolista y anti catalanista que los políticos han fomentado. No voy a entrar en las razones pero parece claro que estos sentimientos benefician más a los políticos que los instigan que a los propios ciudadanos.
·         La educación.
Creo que todo el mundo estaría de acuerdo en que el futuro pasa necesariamente por la calidad de la educación. Pues bien, las leyes sobre educación que hacen nuestros políticos consiguen, de hecho, deteriorarla cada vez más; cada nueva ley de educación consigue que descienda aún más el nivele educativo de los jóvenes. Cuando uno se plantea el porqué no cabe más que una hipótesis: los sucesivos gobiernos quieren mantener la situación actual porque les beneficia, y nada mejor para ello que ciudadanos incultos, mansos y borreguiles, fáciles de manejar con pequeñas subvenciones en vez de ciudadanos críticos, dueños de sus ideas y de sus vidas. El ideal ilustrado de la educación, que consideraba la formación y la cultura la base para poder participar en una sociedad democrática, parece que nunca como hoy ha estado tan alejado de aquel proyecto.
·         Mentiras y Corrupción
Cuando pensamos en política hoy en día parece que todo el mundo ve de forma natural que los políticos mientan; mienten en campaña electoral y lo vemos normal porque la campaña electoral es propaganda; es como la publicidad para los productos de consumo. Pero mienten habitualmente como parte del ejercicio del poder.
La corrupción también forma parte consustancial de la política, y vemos que los casos que trascienden afectan por igual a los miembros de los dos grandes partidos; creo que más o menos conscientemente todos sabemos que la corrupción está instalada en la clase política con pocas excepciones y que sólo se trata de que no sea descubierta; y si lo es pocas veces llegan los casos a la justicia. Sólo cuando un caso tiene mucha repercusión en la opinión pública los propios partidos aceptan que los implicados paguen un precio político por ello, pero lo hacen como último recurso y sólo mantener su estatus.
Uno de los problemas más graves que lleva implícitos la democracia consiste en que la planificación política se lleva a cabo con vistas a los cuatro años de gobierno. Un partido político que está en el poder trabaja para su propio lucimiento mientras está gobernando, nunca planifica para el futuro del país a largo plazo; y, a veces, hipoteca el futuro en aras de un éxito fácil a corto plazo. No voy a decir que esta es la causa de la actual crisis económica, pero este problema que menciono sí que tiene mucho que ver con ella. El déficit público no ha surgido de la nada; es cierto que lo tiene y lo padece la gente de a pié, pero también es cierto que son los gobiernos los que en su momento lo han autorizado y los que lo han gestionado, y cuando ya es escandaloso e insostenible, trasladan al pueblo sus responsabilidades. Y este problema se agrava cuando no hay un cierto grado de honestidad y responsabilidad en la política.
La existencia de la política es inevitable, y también la existencia de los políticos, pero una de las tareas más urgentes actualmente es depurar las instituciones políticas. Hay que establecer una clara diferencia entre las instituciones necesarias y las no necesarias, los políticos necesarios y los que deben ponerse a trabajar. EL criterio es muy claro, el fin de la política es el bien común; cuando la política redunde en beneficio comunitario se justificaría, cuando esté guiada por el interés del político o de su partido no. Los ciudadanos deben exigir responsabilidades a sus gobernantes por lo que hacen o dejan de hacer en el ejercicio de sus cargos. Ni su cargo, ni el dinero público les pertenecen y no tiene carta blanca para su uso; están ahí por delegación de la ciudadanía y deberían responder de la forma en que ejercen sus cargos.
Daniel Montero publicaba, no hace mucho, un libro sobre la clase política titulado La Casta. En él pone de manifiesto que lo de ser político en España es un chollo; que no se sabe cuántas personas con cargos públicos cobran de las arcas de Estado, ni lo que cobran globalmente; que tampoco se conocen las cifras de absentismo laboral de estos ‘trabajadores’, aunque se intuye.
Se sabe que despilfarran cantidades astronómicas en dietas, viajes y coches oficiales y que tienen privilegios que el resto de los ciudadanos no alcanzamos ni a soñar…
Creo que en un futuro más o menos lejano aumentarán las voces que hoy ya denuncian esta situación; los ciudadanos tomarán conciencia de quién es su verdadero enemigo y lucharán contra la explotación de la que estamos siendo objeto, pero ese ya es tema para otro capítulo.

Nos quedará algo?

Nos quedará algo?
Lagrimas negras

NOS QUIEREN GOBERNAR

NOS QUIEREN GOBERNAR